Los primeros tractores tiraban del arado de una forma muy parecida a la de los bueyes o caballos que los precedieron: a través de una barra o “cuarta” fijada con un perno transversal a un enganche en forma de “C” colocada en, o cerca del diferencial del eje trasero.
POR JOSÉ LUIS AMADO -PERIODISTA AGROPECUARIO E HISTORIADOR- EXCLUSIVO PARA NOTICAMPO.
Mucho del esfuerzo de tracción se desperdiciaba, porque este tipo de unión era flexible, y no era posible fijar la profundidad del surco que creaban los discos o la reja del arado. Por la ubicación del punto de fijación, y su flexibilidad, cuando el arado se trababa por culpa de una roca o raíz, toda la energía del motor aplicada al eje trasero, al no poder girar las ruedas…, giraba al tractor entero, haciendo que vuelque sobre sí mismo, con consecuencias mortales para el conductor. Esta incidencia, más frecuente de lo que uno pudiera pensar, se conoce como “roll over”.
El enganche de 3 Puntos consta de un brazo central superior con libertad de movimiento en sentido vertical, y dos brazos inferiores con elevación hidráulica.
Estos tres miembros están abulonados al implemento remolcado, y su geometría es tal, que el punto de aplicación de las fuerzas, tanto de resistencia del arado, como de tracción del tractor, queda ahora por detrás y por abajo del eje trasero. De este modo la resistencia del arado genera resultantes que adhieren el tractor contra el suelo, mejorando la tracción, y también disminuyendo la tendencia al “roll over”.
La fuerza hidráulica de los brazos inferiores, y su rígida unión al implemento remolcado, hacen posible también la regulación de la profundidad del surco.
El señor Ferguson
En 1926, Harry Ferguson, quién durante mucho tiempo había sido un defensor de la importancia de la fijación rígida del arado al tractor, en 1926 presentó y patentó en Gran Bretaña el enganche de 3 Puntos para tractores agrícolas.
Foto de Harry Ferguson.
Dicen que la idea original, tal como suele ocurrir con los avances tecnológicos y mecánicos que no son otra cosa que la decantación lógica de algo, no fue exclusividad de su inventiva, pero sí lideró su popularización a lo largo de muchos años de explicar para qué servía esta forma de enganchar equipos agrícolas.
Durante la década de 1916 a 1926, Ferguson desarrolló sus ideas a través de varias iteraciones, dúplex y tríplex, mecánicas e hidráulicas, hasta llegar a la forma patentada.
Y durante la década siguiente, continuó explicando y vendiendo sus enganches e implementos e incluso produjo su propio modelo de tractor en cooperación con David Brown Ltd. a través de la Ferguson-Brown Company.
La geometría particular del enganche, que en sus principios unía el arado al tractor, permitía que las fuerzas generadas por el arado se aplicaran a las ruedas traseras del tractor.
Esto redirigió la resistencia del arado hacia la fuerza descendente sobre las ruedas motrices, lo que permitió que el tractor de Ferguson fuera mucho más ligero y maniobrable que los modelos anteriores de tractores agrícolas con fuerza de tracción y tracción equivalentes.
Como resultado, su tractor podía operar en suelos blandos y causaba menos daño por compactación al piso en comparación con otros tractores de la época, y podía trabajar más liviano acelerando las tareas y consumiendo menos combustible.
El enganche de 3 Puntos, operado y controlado hidráulicamente, usaba el tiro de la herramienta montada para moderar la profundidad de la herramienta y, por lo tanto, la carga en el tractor (control automático de profundidad o control de tiro).
Además, el enganche de 3 Puntos de Harry Ferguson evitaba que el tractor volcara hacia atrás sobre las ruedas motrices cuando el implemento que se arrastraba se trababa con una roca u otra obstrucción inamovible. Recordemos que por aquellos años, estamos hablando de casi 100 años atrás, existían gran cantidad de tierras vírgenes con habituales obstáculos enterrados. Esto hacía que ocurriesen muchos accidentes con consecuencias fatales para los operadores de los tractores.
Lo cierto es que Harry Ferguson y sus colegas desarrollaron varias innovaciones para este dispositivo (por ejemplo, el control hidráulico de elevación y profundidad) que hicieron que el sistema fuera viable, efectivo y, además, deseable.
En 1938, después de más de una década de intentar convencer al industrial americano Henry Ford que utilizara el sistema de Ferguson en sus tractores de serie, Ferguson lo logró. El debut en el mercado de tractores americanos se produjo en 1939 con el, para la época, modernísimo modelo Ford-Ferguson 9N.
Foto en dónde se ve a Harry Ferguson mostrarle su invento a Henry Ford.
El sistema Ferguson, como se lo denominaba al equipo 3 Puntos en esos momentos, no era simplemente un enganche mejorado, sino más bien un enganche seguro y útil de una línea completa de implementos diseñados específicamente para aprovechar al máximo sus ventajas.
Durante la década de 1940, fue tan ventajoso y popular el 3 Puntos, que otros fabricantes se vieron obligados a presentar mejoras competitivas que también podían presentarse como «sistemas» patentados con al menos algunas de las características del sistema Ferguson (como enganche y desenganche rápido, elevación y descenso de implementos controlados desde el asiento del tractor y tratamiento del tractor y el implemento como una unidad en lugar de un par articulado).
Publicidad de la época. En la misma se destaca el slogan: Muchos tractores tienen elevadores hidráulicos, pero solo Ferguson tiene un Sistema.
Así, la empresa americana International Harvester se vio obligada a salir a competir con un equipo similar y para ellos desarrolló su enganche rápido y comenzó a publicitar la noción de «cultivar con el sistema Farmall». Por su parte, la Allis-Chalmers presentó su acoplador a presión, el cual permitía al operador enganchar y desenganchar los implementos sin abandonar el asiento. Del mismo modo, la empresa CASE desarrolló su enganche denominado Eagle (águila), y hasta la propia John Deere siguió un camino similar.
Algunos de estos sistemas, con enganches de uno o dos puntos, no eran adecuados para levantar implementos pesados. También presentaban el problema por la incompatibilidad entre las marcas de tractores e implementos, lo que ejercía una presión hacia la dependencia del proveedor, por lo que se generó un gran disgusto por parte de los agricultores.
Durante las décadas de 1950 y 1960, los agricultores a menudo tenían que comprar implementos de la misma marca que su tractor para poder enganchar el implemento correctamente. Si un agricultor necesitaba usar un implemento de marca diferente a su tractor, necesitaba de un kit de adaptación, el cual por lo general era torpe, su ajuste no era el ideal y esto se traducía en inseguro.
La presión hacia la dependencia del proveedor era un arma de doble filo para los vendedores. Esto suponía una ventaja en los casos en que fomentaba la venta de implementos (por ejemplo, un agricultor decidía comprar no sólo un tractor sino también nuevos implementos para sustituir los viejos, apostando a que una mayor productividad valiera la pena), pero era una desventaja en la medida en que los agricultores no veían el valor de un enganche nuevo especial si no podían permitirse también comprar nuevos implementos para aprovecharlo al máximo. O se sentían incómodos al comprar nuevos implementos cuando ya tenían implementos existentes que todavía eran utilizables.
En este sentido, Ferguson se enfrentó a menudo a este último problema en el Reino Unido e Irlanda en los decenios de 1920 y 1930, y también se aplicó a los enganches patentados de sus competidores de los decenios de 1940 y 1950.
En la década de 1960, cuando expiraron las patentes con la tecnología de Harry Ferguson, los fabricantes de tractores e implementos acordaron que el enganche de 3 Puntos sería el único sistema estándar, intercambiable y con todas las funciones para enganchar implementos a los tractores.
Con la llegada del estatus de no propietario, los fabricantes pudieron refinar el sistema y crear modificaciones cada vez más útiles. Ahora, casi todos los fabricantes han adoptado alguna forma estandarizada del moderno sistema de enganche de 3 Puntos que inventó el gran Harry Ferguson.
Conclusión
En el panorama agrícola moderno actual, el enganche de 3 Puntos sigue siendo un componente indispensable de los sistemas de tractores, encarnando el espíritu de innovación y eficiencia que sigue impulsando el progreso en la agricultura.
La ingeniosa invención de Ferguson no solo simplificó el proceso de enganche de implementos, sino que también mejoró significativamente la funcionalidad, la versatilidad y la maniobrabilidad del tractor en el campo.
Al reflexionar sobre el impacto del enganche de 3 Puntos, agricultores de todo el mundo le expresan su gratitud a Harry Ferguson por su notable contribución a la producción más eficiente de los alimentos. Su visión e innovación han dejado una marca indeleble en las prácticas agrícolas, dando eficiencia a la forma en que se hacen los cultivos, se labran los campos y se recogen las cosechas.
El sistema Ferguson, hoy denominado 3 Puntos, es elogiado como uno de los mayores avances en la mecanización agrícola mundial.
El final de Harry
Ferguson, quien fue un autodidacta con solo educación primaria y que había nacido en Irlanda del Norte, falleció el 25 de octubre de 1960 en su residencia de Lower Swell (un pequeño pueblo del condado de Gloucestershire, Inglaterra), debido a una sobredosis de barbitúricos. La investigación no pudo determinar de manera definitiva si la sobredosis fue accidental o intencional.
Otra foto de Harry Ferguson y Henry Ford.
Un equipo 3 Puntos hoy.