Cuando el productor siembra de maíz tardío, lo hace, como en las de más siembras, procurando lograr el mayor potencial de rinde posible a cosecha, sin perder de vista los costos, pero, además, prestando atención a dos aspectos en particular. A las condiciones climáticas cambiantes tanto en fechas como en ubicación geográfica, por un lado, y por otro a la nutrición del suelo, con la poca información disponible que se tiene en este aspecto.
Los aspectos climáticos le imponen ritmo y velocidad a la siembra tardía, cuya ventana óptima es más estrecha que en los maíces de primera fecha, y si se le agrega que la superficie destinada a las siembras tardías es por lo general creciente, entonces para cubrir la demanda resultante será mejor disponer de equipos capaces de sembrar sin demoras.
Debido a ello, para cubrir la mayor cantidad de hectáreas en el menor tiempo posible, pero con alta calidad de siembra la dosificación neumática de semilla ofrece doble beneficio. Por un lado, demanda menores tiempos de calibración de densidad de siembra, y por otro, la distribución de la semilla en el surco resulta de mayor uniformidad sin necesitar semillas de tamaño y forma tan uniformes como sí lo demanda la dosificación mecánica.
Otro beneficio de la dosificación neumática es que permite utilizar trasmisión electrohidráulica con corte por secciones o la trasmisión eléctrica con corte por cuerpo, y lo bueno es que cada una de esas soluciones evitan la sobre siembra en cabeceras siempre que el tractor este equipado con navegación satelital. Claro que las trasmisiones eléctricas son más eficientes que las electrohidráulicas en evitar el desperdicio de semilla y la competencia entre las mismas plantas de maíz.
El ahorro de semilla y los mayores rindes a cosecha por evitar la competencia entre las mismas plantas del maíz, permiten que estas mejoras tecnológicas se paguen solas en pocas campañas –una a dos– dependiendo de la cantidad de hectáreas que se siembren.
Calibraciones en menos tiempo
Si se analiza más en detalle el ahorro de tiempo que se logra con los dosificadores neumáticos, se puede destacar la menor la cantidad de tiempo que se requiere para la calibración del mecanismo enrasador de un dosificador neumático comparado con que el tiempo que requieren los gatillos expulsores y el gatillo enrasador de un dosificador mecánico.
Asimismo, es menor el tiempo que demanda la calibración medida en bares del aire de succión o de presión, -según el modelo de sembradora- que el tiempo que demanda la búsqueda de la placa de siembra adecuada para la semilla empleada.
En verdad todos los aspectos que hacen al ahorro de tiempo relacionados con la siembra neumática, son relevantes a la hora de calibrar la máquina para la siembra de maíces tardíos, sin olvidar los mayores costos en sembradora y en tractor, debido a su sistema hidráulico.
Fertilización
El otro elemento a considerar durante la siembra de los maíces tardíos es la definición de la estrategia de fertilización y el costo del insumo, un componente esencial para el cultivo de maíz. En este aspecto son varios los puntos a tener en cuenta. Uno de ellos es el momento de la fertilización, teniendo en cuenta que las demoras eventuales durante la siembra debido a dificultades en el manejo de los granulados -debido a su higroscopicidad- no se justifican en el ahorro de dinero que en el momento pueda significar.
En este punto es para tener en cuenta que las máquinas sembradoras con dosificación variable de fertilizante pueden ser una tentación importante para reducir costos y pasajes de máquinas por el lote que será mejor evaluar en cada caso en particular.
La fertilización variable luego del análisis de suelo correspondiente, trae aparejado una mejora sustancial en el piso de rendimientos, mayor estabilidad del sistema y una disminución en la brecha de rinde entre años buenos y malos. No obstante, para que esos resultados sean contundentes, la fertilización no puede interferir en el desarrollo de la siembra en tiempo y forma, aspectos relevantes en los maíces tardíos.
