Sugieren eliminar una exención que tienen los inmuebles rurales. Según el proyecto de presupuesto 2025, los ingresos por retenciones se duplicarán y representarán 1,43% del PIB (ahora es 0,96%).
Expertos del Instituto de Estudios sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (IERAL), de la Fundación Mediterránea, diseñaron un esquema para reducir gradualmente las retenciones que desde hace años soporta el campo argentino. Con una salvedad: proponen eliminar la exención que tiene los inmuebles rurales en el impuesto a los Bienes Personales.
El proyecto hace foco en quitar los Derechos de Exportación, pero sin afectar el frente fiscal, una obsesión del Gobierno de Javier Milei.
La mayoría de los derechos de exportación (DEX) se aplican sobre commodities con precios dados por el mercado internacional. Por ende, toda suba en la carga tributaria sobre estos productos deriva en el traslado ‘hacia atrás’, disminuyendo el precio al productor”, sostiene el documento.
Luego, a la descripción de los efectos nocivos de las retenciones agrega: “El primer impacto es penalizar la rentabilidad de producir estos bienes, desalentando la inversión. Como reducen el precio de los productos en todas las operaciones, ya sea de exportación o venta local, el segundo impacto es actuar como un subsidio a la demanda interna. A estos problemas asignativos, que llevan a desalentar la producción y las exportaciones, y a exacerbar el consumo interno de determinados productos, se suma un tercer impacto muy negativo, porque al aplicarse con alícuotas diferentes y no gravar determinados bienes, los DEX distorsionan todo el sistema de precios relativos”.
Según el análisis realizado por la entidad, el contexto macroeconómico actual exige mucha prudencia en los cambios tributarios ya que la prioridad es preservar el equilibrio fiscal.
“Los espacios para seguir bajando el gasto público existen, pero luego del fuerte ajuste aplicado, resultan acotados y requieren tiempo para su instrumentación. Por otro lado, los DEX no son los únicos tributos altamente distorsivos que es necesario eliminar”, remarcaron.
En consecuencia, agregan, resulta recomendable que el proyecto de eliminación de retenciones contemple un sendero de bajas de alícuotas distribuidas en el tiempo, permitiendo compensar las pérdidas de ingresos con la recaudación de otros impuestos o reducciones adicionales en el gasto.
“De esta manera, la propuesta gana en viabilidad, no entrando en conflicto con el equilibrio fiscal ni con la presión por la reducción de otros impuestos distorsivos”, aseguraron.
Cómo se evita afectar el frente fiscal
Para la Fundación Mediterránea, una porción de la recaudación perdida por eliminación de retenciones se recuperaría de forma automática (sin cambios en otros impuestos) vía Impuesto a las Ganancias (en un monto que dependerá de la alícuota que enfrente el productor por cada peso que aumentan sus ingresos gracias a la baja de los DEX, y de los niveles de evasión existentes) y otros tributos vinculados a la actividad económica (IVA, Impuesto a los Débitos y Créditos, Impuesto a los Ingresos Brutos).
“Los sectores gravados recuperan ingresos que destinarán al consumo y a la inversión, y con mayores precios internos se incrementa el gasto del consumidor, por tanto, también la recaudación de impuestos al consumo”, afirman.
Luego explican que el remanente de pérdida de recaudación puede ser compensado eliminando la exención que tiene los inmuebles rurales en el Impuesto a los Bienes Personales, junto con activar un mecanismo para mejorar la actualización de las valuaciones.
“Lamentablemente, en los cálculos de Gasto Tributario del Presupuesto 2025 se omite valuar este componente. Sin embargo, en base a estimaciones propias, si se gravasen los Inmuebles Rurales de las principales provincias agropecuarias al 80% de su valor de mercado, con las condiciones estructurales del Impuestos sobre Bienes Personales para 2025, se podrían generar ingresos equivalentes entre 25% y 30% de la recaudación de retenciones que aportan esas provincias”, detallan en la propuesta.
Y después aseguran: “Tras la aplicación simultánea de las diferentes medidas mencionadas la rentabilidad neta de las empresas actualmente alcanzadas de hecho por los DEX debe aumentar, pero ahora con un mix impositivo menos distorsivo”.