La Federación Agraria Argentina alertó que el uso propio del agricultor está en peligro frente al avance del cobro compulsivo de regalías extendidas. Productores, Cooperativas y multiplicadores expresaron su preocupación.
La Comisión de Semillas de Federación Agraria Argentina, con la participación de Agricultores Federados Argentinos (AFA), la Federación de Cooperativas Federadas (FECOFE) y la Cámara Argentina de Semilleros Multiplicadores (CASEM), manifestó su preocupación ante el avance de algunas empresas que pretenden controlar todos los eslabones de la cadena bajo argumentos ajenos a la Ley de Semillas.
En este marco, afirmaron que el derecho de Uso Propio Gratuito, consagrado en la ley de Semillas y Creaciones Fitogenéticas y en UPOV 78, «está siendo vapuleado por la industria semillera y se advierte que INASE no actúa como debiera».
El cobro de regalías extendidas no sólo perjudica al productor, limitando su derecho a Uso Propio Gratuito, también condiciona al resto de los eslabones de la cadena que se encuentran obligados a partir de un claro abuso de posición dominante, a cumplir condiciones comerciales que difieren con los derechos consagrados en la ley 20247.
Desde la comisión señalaron que «la flexibilización de derechos en favor de las grandes empresas, transnacionales en su mayoría, con una clara transferencia de recursos y propiciando su concentración, se refleja en el avance de condiciones de regalías extendidas en la mayoría de las variedades y la imposición de parte de un sector concentrado de la industria semillera, que a través de contratos y facturas que incorporan leyendas en forma unilateral, pretenden comprometer a los productores que se ven reflejados en una renuncia a su derecho de Uso Propio Gratuito».
Asimismo, describieron que «los productores reciben innumerables cantidades de mails, llamados telefónicos, cartas documento, notas y facturas, con condiciones estipuladas en el abuso de posición de la empresa proveedora de tecnología». Dicha situación de acoso, y de carácter ilegal, es encabezada por la asociación ArPov adjudicándose derechos que no le corresponden, solicitando información de carácter privado y confidencial a los productores.
Estas empresas no sólo vulneran los derechos de los productores, también condicionan al resto de los eslabones de la cadena, principalmente a los semilleros criadores y multiplicadores, quienes son los principales responsables de mejoramiento genético de nuestras semillas y hacia donde tiene que orientar el Estado sus políticas.
Por lo cual, exigimos al INASE que se aboque a garantizar los derechos, tanto de los productores (primer fitomejorador), como de los semilleros criadores y multiplicadores, en base a la ley de semillas, y el cobro de derechos intelectuales en bolsa, por variedades. También deberá establecer acuerdos y estrategias para combatir el comercio ilegal de semillas en donde nos encontrará a todos acompañando los esfuerzos que se realicen en ese terreno.
Para finalizar, los integrantes de la Comisión de Semillas de FAA recordaron que «la soberanía tecnológica pertenece a toda la Argentina» y advirtieron que «los productores nucleados en la Federación Agraria Argentina, no estamos dispuesto a cederla». Por ello señalaron: «Por este contexto, es que estamos obligados a hacer pública una vez más la defensa del USO PROPIO GRATUITO, exigiendo CLARIDAD en las FACTURAS de COMPRA, TRANSPARENCIA en los MECANISMOS de CONTROL, un Estado presente en la defensa de la ley y sus derechos consagrados y bregamos por el ORDEN PÚBLICO en materia de semillas».