La Bolsa de Cereales de Córdoba (BCCBA) informó que la producción del cultivo de maní en esa provincia sufrirá una histórica disminución debido a la sequía, proyectándose casi a la mitad de la campaña anterior. Siendo la peor cosecha en más de una década.
Según el reporte de la BCCBA, el avance de la recolección de maní se mantuvo en rangos históricos, finalizando durante la segunda quincena de julio con la cosecha completa de los lotes. Las estimaciones más recientes indican que la producción de grano limpio y seco experimentará una drástica disminución, debido a rendimientos más bajos y reducción en la superficie cultivada.
El informe también pone énfasis en un hecho ya conocido en las áreas maniseras: los rendimientos promedio en caja sucia y húmeda alcanzaron los 29 quintales por hectárea, mientras que los rendimientos en caja seca y limpia fueron de 24 quintales por hectárea. Estos valores reflejan caídas del 24% y 27% respectivamente, en comparación con el año anterior, y del 16% y 35% en comparación con el promedio histórico.
Y otro dato más, de un total de 249 mil hectáreas sembradas, se cosecharon unas 230 mil. Estos números dan forma a una campaña agrícola desoladora, marcada por el impacto de la sequía.
La principal zona productora de maní en Córdoba es la región conocida como “Cuenca Manisera”, que abarca áreas como las localidades de Hernando, General Cabrera, General Deheza y zonas cercanas.
La provincia mediterránea ha sido históricamente líder en la producción de maní en Argentina. Según el Sistema de Información Simplificado Agrícola (SISA), el 89% de las 1.051 explotaciones agropecuarias que se dedican a la producción de maní se encuentran en Córdoba. Además, esta provincia alberga a 23 de las 25 empresas que conforman el Sector Agroindustrial Manisero (SAM), una denominación utilizada por la Cámara Argentina del Maní. Estos datos subrayan la preeminencia de Córdoba en la industria a nivel nacional y el impacto negativo que tuvo la sequía.