Tras la queja de la Federación de Acopiadores de Granos de terminar la eximición en Ganancias para quienes operan bajo la figura de cooperativas, ahora se sumaron los centros de corredores de cereales de Bahía Blanca, Buenos Aires, Rosario y Santa Fe.
La semana pasada la Federación de Acopiadores elevó al ministro de Desregulación y Transformación del Estado de la Nación, Federico Sturzenegger, el tema de las distorsiones al mercado de granos producto de la exención del Impuesto a las Ganancias a las empresas organizadas bajo la forma de cooperativas. “Ellas compiten con nuestros asociados en un mercado granario de grandes volúmenes y márgenes muy reducidos”, dicen los Acopiadores en una carta enviada también al ministro de Economía, Luis Caputo, a la presidente de la Cámara de Senadores de la Nación, Victoria Villarruel, al presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Martín Menem, y los presidentes de las comisiones de Presupuesto y Hacienda y de Agricultura de ambas cámaras.
En la misiva, la Federación de Acopiadores expresa que “esta exención genera inaceptables discriminaciones en contra de las empresas no cooperativas y competidoras, quebrantando el art. 16 de nuestra Constitución Nacional que consagra el principio de igualdad como `base del impuesto y de las cargas públicas´”. Y continúa: “La exención comentada atenta contra la asignación eficiente de los recursos productivos que, en lugar de utilizarse de acuerdo con su productividad marginal, se lo hace siguiendo meras preferencias impositivas. Cuando se atenta contra la productividad se afecta el crecimiento de la economía”.
Además, insisten en una afirmación “que parece elemental pero muchas veces es olvidada”, haciendo referencia a que “empresas de igual actividad deben estar sujetas al mismo tratamiento impositivo en cualquier jurisdicción”. En esa línea, los acopiadores remarcaron que “es necesario terminar con privilegios y discriminaciones impositivas entre empresas de una misma actividad”.
“Cuesta mucho entender que empresas cooperativas comercializadoras de granos, insumos, industrializadoras de aceites, harinas, biocombustibles, exportadoras, frigoríficos, dueñas de puertos, bancos, compañías de seguros y supermercados estén eximidas de pagar impuestos a las ganancias cuando sus competidores no cooperativos y hasta los trabajadores en relación de dependencia de dichas cooperativas deben tributar”, afirman, y se preguntan cuáles pueden ser los fundamentos económicos que sostienen tal eximición. “Las respuestas mayoritarias afirman que las cooperativas no persiguen fines de lucro en el marco de actos cooperativos y organización basada en “el esfuerzo propio y la ayuda mutua. Frente a esta respuesta surge también la siguiente pregunta: ¿Si las cooperativas no tienen lucro (ganancias) cuál es la razón para solicitar la exención del impuesto a las ganancias? No conocemos respuestas con argumentaciones robustas a esta pregunta”.
Ahora, y mediante un comunicado titulado «Por un Mercado Agropecuario Equitativo: Llamado a la Igualdad Fiscal y Competencia Justa», los centros de corredores de cereales de Bahía Blanca, Buenos Aires, Rosario y Santa Fe, en línea con los principios de una economía liberal y competitiva, expresaron su preocupación cuando «la figura cooperativa se utiliza para conformar entidades de gran tamaño que, aprovechando exenciones fiscales como la no tributación del Impuesto a las Ganancias, generan condiciones de competencia desiguales frente a las pequeñas y medianas empresas (PyMEs)».
«Consideramos que esta situación distorsiona el mercado, se aleja del espíritu original del cooperativismo y viola el principio constitucional de igualdad de los ciudadanos ante la carga de los tributos. Este principio garantiza que todos deben ser tratados de manera equitativa en materia fiscal, contribuyendo al sostenimiento del Estado en proporción a su capacidad económica y sin discriminaciones arbitrarias», apuntaron.
Desde los centros de corredores de cereales de Bahía Blanca, Buenos Aires, Rosario y Santa Fe creen que firmemente en la importancia de promover un mercado libre y competitivo, donde todas las entidades operen bajo las mismas reglas y contribuyan equitativamente al sistema impositivo. «Las ventajas fiscales no deben utilizarse para crear desequilibrios en la competencia, sino para fomentar el desarrollo y el bienestar de todos los participantes del sector», alertaron.
Por último, sostuvieron que es fundamental revisar el marco regulatorio para eliminar distorsiones y asegurar que todas las entidades, independientemente de su figura jurídica, compitan en igualdad de condiciones. «Nos comprometemos a trabajar conjuntamente con todos los actores involucrados para impulsar políticas que fomenten la libertad económica, la equidad y el crecimiento equilibrado en nuestra industria, promoviendo además la transparencia y claridad en las leyes fiscales», cerraron.