Por la crisis sanitaria y económica, Cuba promueve el consumo de carne de cobayo por ser una «alternativa rápida y sostenible» para reemplazar las carnes tradicionales.
Pese a ser conocidos como mascotas en nuestro país, en Cuba impulsan el consumo de cobayos para reemplazar las carnes tradicionales. También conocidos como cuis o conejillo de indias, el cobayo se consolidó en el país del Mar Caribe como un alimento digno de competir con la carne bovina y porcina.
La presentación del cobayo como apto para el consumo se desarrolló en el marco de un taller culinario en la provincia de Mayabeque que fue televisado por el Noticiero Nacional de Televisión. Durante el curso, se degustaron más de una decena de platos con este ingrediente y los expertos no dudaron en recomendarlo a la población cubana «para la crianza y consumo».
Según lo que detallaron en el evento, el cobayo es «una alternativa rápida y sostenible para alcanzar al soberanía alimentaria» que tiene, además, como beneficio altos niveles de proteína que superan «a los registrados las carnes bovinas y porcinas».
Los cubanos compran el animal más que nada como mascota, pero los que lo prueban, ya lo compran para comer.
Con un contenido promedio de proteína del 19%, este animal es presentado por las autoridades cubanas como «un aliado clave contra la anemia y la desnutrición». Su consumo, según el chef internacional de la Asociación Culinaria de Mayabeque, Ismael Arjona Núñez, puede ser de varias maneras e inclusive se pueden hacer hamburguesas o albóndigas si se deshuesa y muele la carne.
Para evitar un fenómeno como el murciélago en Wuhan, en el que la crianza y consumo de animales salvajes no siguió ningún tipo de cuidado de condiciones sanitarias y bromatológicas, la presidenta de la sociedad de Cunicultores y Cuycultores de ACPA en Mayabeque, Barbara Rodríguez Rey, afirmó que se necesitan construir «órganos de base» y «grupos de capacitación» para fomentar la crianza de este roedor.
El recibimiento de este alimento por parte de la sociedad cubana todavía no es total, sin embargo, un productor de Mayabeque, Samuel Cabrera Zamora, afirmó que los cubanos compran el animal más que nada como mascota, pero «los que los prueban, ya lo compran para comer».