La historia del emprendedor juninense Jorge Gómez, titular de Metalúrgica El Gauchito.
El 16 de abril pasado se celebró el Día Mundial del Emprendimiento, una fecha que festeja el empuje y el desarrollo emprendedor como manera de fomentar la generación de ideas y su puesta en marcha. Uno de los más grandes emprendedores de todos los tiempos fue Steve Job, creador de Apple. Decía Job que para tener éxito como emprendedor se debía tener visión y pasión, dos características que cumple perfectamente nuestro entrevistado.
Jorge Gómez, está a poco de cumplir 49 años y aunque solo posee estudios básicos, esto no anuló su nivel de autosuperación al desarrollar destacados conocimientos de ingeniería industrial. Tal es así que hace gala de no poseer los planos ni los dibujos técnicos de sus máquinas. “Para qué, si todo lo tengo acá” dice y se señala la cabeza remarcando que no necesita de los planos para construir una intrincada máquina agrícola.
Sus comienzos
En su juventud se desempeñó como herrero fabricando utensilios para la parrilla, como palitas y otros elementos a tal fin. Luego fue un poco más allá y comenzó a construir y vender parideras para cerdo. Pero en 2008, ya decidido a ingresar con nuevos productos para el agro, desarrolló siendo el primero en hacer esto en todo el país, una plataforma de cosecha trigo/soja con doble mando de bocha.
“Y eso no es todo, -explica Jorge-, porque en 2010 reformé una plataforma convencional y la hice Drapper. Las llegué a fabricar en 30 y 35 pies de ancho de corte y la lona que usé estaba hecha especialmente para mí por una empresa de Buenos Aires la cual tenía 1,12 mts de ancho”. Destaca Jorge que él fue el primero en hacer esa reforma, hoy tan usada. Incluso remarca que fue el primero en hacerla con bocha hidráulica.
Otra herramienta relacionada a la cosecha que desarrolló y hasta llegó a fabricar fue una plataforma de corte directo. “Esa plataforma la hice en 2011 y era una plataforma de corte para cebada, trigo, soja, alfalfa y maíces caídos. Se trata de un cabezal de corte que se coloca en la picadora de forrajes. Hoy un cabezal muy parecido al que yo fabriqué se importa de Europa”, destacó Gómez.
Otro producto novedoso realizado por Gómez fue una máquina automática para realizar el triple lavado en bidones de agroquímicos usados.
Entre las tantas herramientas agrícolas que desarrolló Jorge hay una que se destaca por su innovación. Se trata de una serie completa de equipos agrícolas para ser arrastrados por quatriciclos. Esta idea surgió observando las necesidades de productores quinteros y cultivos en pequeñas superficies. Para estos desarrolló sembradoras a chorrillo, palas champion, rastras a disco, carro multiuso, cosechadora de lechuga y hasta pequeños pulverizadores de arrastre.
En la actualidad
Hoy día y desde el 2008, su empresa “Metalúrgica El Gauchito” se dedica casi con exclusividad a la venta, reparación y mantenimiento de los famosos cabezales alemanes Kemper que utilizan grandes marcas John Deere, New Holland y Claas en sus picadoras de forrajes.
En este sentido explica Jorge que “cuando no se consiguen algunos repuestos para estos cabezales los fabrico yo mismo aquí en la metalúrgica, es más desde acá también se los proveemos a algunos concesionarios que nos lo piden”.
Cabe destacar que este tipo de trabajos son muy demandados por los usuarios de picadoras de forrajes y solo lo realizan especialistas en el tema, tal es así que existen solo cinco talleres en todo el país.
Otro servicio que ofrece a clientes y amigos “Metalúrgica El Gauchito” es el de cementado en frío con sistema Arco Spray y el corte de chapas a medida mediante plasma CNC.
Y como a los desarrolladores y emprendedores nada los detiene, Jorge está a punto de lanzar un nuevo producto. Se trata de un carro de arrastre para recolectar fardos rectangulares. “Este va a ser mi nuevo producto para el campo. Se trata de carro todo hidráulico para juntar los fardos rectangulares del campo. Es una máquina nueva que va a ser de gran utilidad para aquellos que hacen fardo porque no solo los junta, sino que también los apila”. Comentó entusiasmado Jorge por la nueva idea.
«Yo no soy un visionario, mi única virtud es reconocer una necesidad y hacerla”. Jorge Gómez dice que no se ve a sí mismo como un innovador en maquinaria agrícola sin embargo lo es y aunque no lo diga, aseguran quienes más lo conocen que no lo imaginan vivir de otra forma.