Esta semana se conoció una polémica campaña contra los agroquímicos, bajo el nombre #BastaDeVenenos. Esa campaña fue respondida por otra, pero de los productores e instituciones profesionales, que se llama #BastaDeMiedos, la cual fue tendencia nacional.
POR: José Luis Amado para Diario La Verdad.
El pasado jueves se dio a conocer una serie de videos bajo la consigna #BastaDeVenenos. Este hashtag se trasformó en un ida y vuelta que desnudó un debate que reclama una solución de fondo y en el cual la política solo mira para el costado. Tal es así que la provincia de Buenos Aires carece de una normativa ordenadora, pues cada distrito hace lo que le parece en base a ordenanzas municipales.
Todo comenzó cuando figuras públicas del campo del arte, el periodismo, los derechos humanos y hasta de la gastronomía se sumaron a la campaña «basta de venenos», una iniciativa que advierte sobre la utilización de agroquímicos en Argentina. «La campaña #BastaDeVenenos está enfocada en difundir e instalar esta problemática en sectores más amplios de la población, con el propósito de promover la toma de conciencia sobre cómo el modelo de producción agropecuaria está afectando tanto la salud de productorxs, trabajadorxs y comunidades rurales, así como a todxs quienes vivimos en las ciudades y al ambiente en general», expresaron textual desde el colectivo a través de un comunicado.
También, en sus redes indicaron que «Los agrotóxicos están en el aire que respiramos, en el agua que tomamos y en los alimentos que comemos». En esa línea, alertaron que «todos estamos expuestos a los daños que genera el glifosato y otros químicos que son utilizados en las producciones agrícolas».
Entre quienes se sumaron a esta propuesta se encuentran Leonardo Sbaraglia, Julia Mengolini, Nora Cortiñas, el chef Francis Mallman, Laura Azcurra, la cantante Hilda Lizarazu y el periodista de C5N Alejandro Bercovich, entre otros.
Esa estrategia publicitaria disparó una respuesta inmediata tanto de productores, asociaciones técnicas, gremiales y personalidades ligadas al sector agropecuario que fue tendencia nacional. Por caso, el periodista Héctor Huergo en twitter escribió: “Soy Héctor Huergo. Tengo 75 años, 50 de ingeniero agrónomo y periodista agropecuario. Estoy orgulloso de haber divulgado las tecnologías que permitieron generar 2.500 millones de toneladas de comida sana desde que ejerzo”.
La Cámara de Sanidad Agropecuaria y Fertilizantes (Casafe) emitió un comunicado, donde sostuvo que “detrás de todos los alimentos y productos hay miles de profesionales del agro, científicos y reguladores que estudian durante muchos años para garantizar la seguridad de lo que consumimos y utilizamos”. Y termina diciendo: «Somos personas que al igual que ustedes se preocupan por lo que comemos, por el ambiente y por la salud. Por eso nosotros también decimos BASTA. Basta de estigmatización, basta de grietas, basta de argumentos sin ciencia, #BastaDeMiedos».
Por su parte la productora ligada a CARBAP, Andrea Paserini, en sus redes sociales expresó: “Soy Andrea Passerini de Carlos Casares, productora tambera y ganadera, le doy trabajo directo a 12 familias e indirecto a decenas de familias. Produzco leche y carne de CALIDAD. #BastaDeMiedos”.
Quien también se expresó en su twitter fue el Padre Julio Ramos, ex Director de la Escuela Agrotécnica Salesiana en La Trinidad, (Gral. Arenales), escribió: “Soy Julio Ramos, saleciano sacerdote. Desde hace 19 años, con pasión trabajo en Escuelas que forman jóvenes en y con la producción agropecuaria de alimentos: vinos, aceite de oliva, derivados de la leche… Los avances científicos miran a la vida cuidados y salud. #BastaDeMiedos” cerró.
El periodista Osvaldo Bazán fue otro de los que se sumó a la campaña #BastaDeMiedos, al expresar: “Los alimentos que consumo están elaborados responsablemente con fitosanitarios por productores que necesitan cuidar su suelo y su producción”.
Finalmente, la Red de Buenas Prácticas Agropecuarias emitió un comunicado de prensa en la que les recuerda que son “una red con más de 95 organizaciones públicas y privadas de Argentina que trabaja todos los días para promover las buenas prácticas agropecuarias y mejorar los sistemas de producción de alimentos en nuestro país. Nos preocupan los impactos negativos y la desinformación que generan las iniciativas que hoy circulan y que no pasan ni por el tamiz de la ciencia aceptada, ni por la realidad del sector agropecuario”.