Falleció Diego Bocalón, el creador del primer tractor a control remoto

Se acaba de conocer que con apenas 40 años y luego de una larga enfermedad, falleció Diego Martín Bocalón, el joven inventor cordobés que había transformado su viejo tractor Fahr D66F en una máquina inteligente y autónoma.

El jueves 1 de febrero falleció el joven productor tambero oriundo de Chazón, provincia de Córdoba, que se hizo conocido por haber trasformado su viejo tractor en una máquina autónoma manejado a control remoto. Diego Bocalón, en 2015 presentó su invento y obtuvo trascendencia nacional.

Ese dato por sí no era una gran noticia porque como es de público conocimiento, ya existen máquinas propulsadas a distancia en nuestro país. La novedad es que el dispositivo fue pensado y creado íntegramente por un joven de familia tambera para poder hacer totalmente “inteligente” a su viejo tractor Fahr D66F modelo 1973 con pala frontal.

Lo curioso y por demás llamativo es que Diego, con 31 años, sólo tenía estudios secundarios, no era científico ni ingeniero, pero se las ingenió viendo tutoriales de YouTube para transformar su tractor común en uno que se pueda manejar a control remoto.

En 2015, cuando se conoció de su invento, Diego contó que un día viendo a su sobrino Agustín jugando con un autito a control remoto pensó: «qué bueno sería poder aplicar éste mismo sistema en mi tractor”, y agregó: “Cuando se lo conté a mi familia pensaron que estaba loco y creían que me iba a chocar con una vaca».

En diálogo con un medio radial, Diego aseguraba: «No termino de caer, todo esto es una revolución y yo trato de tomarme las cosas tranquilo, mi trabajo me sirve para no pensar demasiado y poder disfrutarlo».

Al explicar su invento, Digo dijo: «Lo que diseñé permite por ejemplo, que el tractor salga solo de manera remota desde el galpón y llevarlo donde uno quiera»

Sobre el tiempo que le llevó hacer el sistema y sus costos Diego afirmó: «arranque a fines del 2014, de materiales gasté entre 13 y 14 mil pesos, la mano de obra la hice casi toda yo y para ciertas piezas específicas le pedí ayuda a un muchacho del pueblo, gran tornero».

Y finalmente explicó que «Si uno busca en internet, no existen éste tipo de tractores, lo único que se encuentran son los de juguete, pero éste que yo diseñé es bien real, único», dijo.

Ese joven ingenioso e hijo de tamberos ya no está entre nosotros, pero deja un legado impactante, el que dice que hasta lo más complejo se puede hacer, que solo se necesita ganas de cambiar las cosas, pasión e ingenio. Chau Diego, volá alto.

https://www.youtube.com/watch?v=LoieqDALOF8

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