Según FADA, el año pasado, siete complejos lograron incrementar sus ventas en valor, en tanto que otros 13, incluso comercializando más en volumen, cayeron en divisas.
De 20 complejos ligados al agro, el año pasado siete de ellos lograron aumentar sus ventas al exterior en dólares, en tanto que otros 13, siempre considerando la facturación en la divisa estadounidense, tuvieron un retroceso.
El dato se desprende del Monitor de Exportaciones Agroindustriales de la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de la Argentina (FADA). En un año donde hubo productos con bajas de precios en medio de la pandemia, otros lograron pese a ello una mejora y terminaron con saldo positivo.
Según FADA, aumentaron las exportaciones en dólares los sectores de carne de cerdo, maní, lácteos, yerba, legumbres, maíz, peras y manzanas. El sector porcino vendió en dólares un 71% más, con US$65,8 millones. El maní expandió sus negocios un 27%, a US$1070,2 millones; los lácteos lo hicieron un 23%, a US$1139 millones; la yerba mate un 7%, a US$91,8 millones; las legumbres un 2%, a 458,7 millones de dólares; las exportaciones de peras y manzanas también crecieron un 2% en dólares, a US$359,2 millones, y el maíz lo hizo un 2%, US$6146,3 millones.
«Las cantidades subieron más que los valores en dólares. En promedio hubo más exportaciones pero con menos precios», señaló a David Miazzo, economista de la entidad.
De los más de US$38.000 millones generados por el agro, el 68% fueron de las cadenas granarias, un 16,5% de las economías regionales, 9,5% por carnes, 3% de lácteos y un 3% de otros productos.
Así como hubo siete complejos que subieron sus exportaciones en dólares, se registraron 13 que cayeron también considerando esta variable. Se trata del complejo soja, con una merma del 12%, a US$14.863,1 millones; girasol, con 29% menos, a US$659,5 millones; trigo, que retrocedió en dólares un 13%, a US$2458,6 millones; cebada, con una baja del 27%, a US$749,3 millones; arroz, que cayó en dólares un 11%, a US$164,9 millones; el complejo bovino, que pese a un récord en volumen con más de un millón de toneladas en valor disminuyó un 13%, a US$3126,6 millones; el sector pesquero, con una caída del 7%, a US$1683 millones; limón, un 8% menos con US$521,8 millones; uva, con una baja del 9%, a US$977,4 millones; forestal, que con US$489,3 millones exportó un 13% menos en valor; té, con una retracción del 13%, a US$77,4 millones; el rubro avícola con un 27% menos, a US$324,3 millones, y el sector ovino, que en dólares vendió, con US$118,6 millones, un 52% menos.
Para destacar, así como se dio esta situación de complejos que vendieron más dólares y otros menos con la moneda, se presentó el escenario de rubros que lograron crecer en volumen pero no en valor. En volumen, por ejemplo, el complejo bovino subió un 10%, el pesquero un 3%, el limón 8% (este producto había bajado 8% a la vez en dólares), la uva un 17% y el sector forestal un 5%, siempre considerando toneladas. En tanto, el maíz además de subir 2% en valor también aumentó 3% en volumen.
FADA, que presentará su monitor de exportaciones en su canal de YouTube, destacó que hubo productos que subieron en el ranking de exportación en volumen a nivel global. La carne de cerdo argentina pasó del puesto 25 al 11, la leche en polvo lo hizo del quinto al cuarto lugar y los limones del séptimo al sexto.
En la entidad remarcan que las exportaciones sirven para dinamizar el empleo. En la organización buscan derribar el mito de que toda la producción se va afuera. «Nos alcanza para las dos cosas, por poner un par de ejemplos: consumimos 50kg de carne de vaca por persona al año, por ende, estamos abastecidos y a la vez nos alcanza para exportar el 29% de la producción. Con el trigo pasa algo similar, consumimos 72 kg por persona al año y exportamos el 59% de la producción de trigo. Una cosa no quita a la otra. Argentina no tiene un problema de producción de alimentos sino un problema de distribución y acceso económico a los alimentos», afirmó Nicolle Pisani Claro analista de FADA