A pesar de esto, las reservas del Banco Central cerraron el mes pasado con una caída de US$ 1.500 millones.
Durante agosto las exportadoras de cereales y aceites liquidaron ventas por US$ 3.387 millones lo que marco una suba del 5% respecto a julio, y un 11% por encima de agosto de 2021.
“El ingreso de divisas de agosto es el más alto del mismo mes de los últimos 20 años”, destacó Gustavo Idígoras, presidentes de la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC), entidades que representan el 48 % de las exportaciones del sector.
Esto se produjo en medio de la caída incesante de reservas del Banco Central, solo en agosto perdió US$ 1509 millones y alcanzó el nivel más bajo desde diciembre del 2016.
Desde Ciara-Cec dieron cuenta de que el monto liquidado desde el 2 de enero de 2022 asciende a US$ 25.696,9 millones “y es el récord histórico desde que existen registros” y un 10% por encima del último año. Además, recordaron que el total de las divisas ingresadas mensualmente “quedan en poder del BCRA quien entrega pesos, a tipo de cambio de oficial, a los exportadores para poder realizar las operaciones de compra y venta de granos en el mercado nacional”.
Idígoras recordó que al igual que sucedió en años anteriores el nivel de ventas “se va a ir reduciendo a partir de septiembre”, ya que los productores tienen menos cosecha para vender.
El informe dio cuenta además que “la exportación de granos se ha visto afectada por los efectos climáticos negativos sobre la cosecha gruesa, así como los efectos de una macroeconomía y mercado cambiario volátil”.
Esto profundizó la capacidad ociosa de la industria de molienda de soja –se estima que trabajan al 50-60% de su nivel– lo que genera “márgenes negativos aun en plena campaña gruesa” cuando tendrían que hacerlo al 100% “y que está llevando a aplicar ceses de líneas de producción”.
En su comunicado Ciara-CEC recordó que liquidación de divisas “está fundamentalmente relacionada con la compra de granos que luego serán exportados, ya sea en su mismo estado o como productos procesados, luego de una transformación industrial”.
La mayor parte del ingreso de divisas en este sector “se produce con bastante antelación a la exportación, anticipación que ronda los 30 días en el caso de la exportación de granos y alcanza hasta los 90 días en el caso de la exportación de aceites y harinas proteicas”.
Esa anticipación depende también del momento de la campaña y del grano de que se trate, “por lo que no existen retrasos en la liquidación de divisas.”
En la víspera, sonó muy fuerte un rumor de que el Gobierno dispondría de un nuevo “dólar -soja” a $200 pesos, el cual se liquidaría de manera directa, versión que fue desmentida por la misma Ciara -CEC.
