En esta campaña agrícola, las siembras costarán entre 22 y 50 por ciento más.
Así surge del reporte cuatrimestral de actualidad que emitieron los Consorcios Regionales de Experimentación Agrícola (CREA), sobre la base de datos relevados en abril pasado, en el que se analiza la coyuntura que atraviesan las empresas agropecuarias de todas las regiones y producciones, tanto extensivas como intensivas y regionales.
Los fuertes aumentos de fitosanitarios -fundamentalmente glifosato- y fertilizantes explican que la inversión para trigo exigirá un 50% más de capital, en tanto que, para girasol, maíz y soja, esos incrementos serán, respectivamente de 42%, 25% y 22%.
De todos los cultivos, los cereales de invierno son los más afectados, ya que los fertilizantes y agroquímicos registran aumentos en torno al 80% y los de las semillas rondan el 30%”, los cuales “sucedieron posteriormente a la siembra del ciclo pasado”, dice el reporte.
Igualmente, dado que todavía restan varios meses hasta que comiencen las siembras, hay variables que pueden seguir perjudicando la ecuación económica del agro. En este sentido, el reporte de CREA dice que “teniendo en cuenta la problemática del combustible, que se registra en plena cosecha gruesa 21/22, habrá que ver cómo evoluciona el costo de los servicios pesificados”.
Al respecto, agrega que difícilmente los granos gruesos sufran un aumento tan alto como el del trigo, debido a que parte de los incrementos que están sufriendo los insumos para la siembra del cereal -sobre todo fitosanitarios y fertilizantes– ya impactaron en la soja y el maíz de la campaña actual.