A poco que termine el sistema de liquidación conocido como dólar-soja, se conoció que aproximadamente unos 7000 productores liquidaron su soja y aportaron a las arcas unos US$ 6.000 millones. Al margen del éxito de la medida gubernamental, continúa la preocupación por el mal estado de los trigos.
POR JOSÉ LUIS AMADO –PERIODISTA AGROPECUARIO- PARA DIARIO LA VERDAD
Las empresas agroexportadoras anunciaron ayer, que el ingreso de divisas en lo que va de septiembre “alcanzó los US$ 6.000 millones”, superando en mil millones el objetivo planteado por el ministro de Economía, Sergio Massa, al anunciar el lanzamiento del Programa de Incremento Exportador, conocido como “dólar soja”.
Así lo anunció la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC), que en su cuenta de twitter señalaron que “el ingreso de divisas desde el 1 de septiembre alcanzó US$ 6.000 millones, sumando más de 11,5 millones de toneladas vendidas por productores, acopiadores y cooperativas”.
Luego del conflicto entre el Ministerio de Economía y el Banco Central por la comunicación de este último restringiendo la compra de dólares y en medio de versiones acerca de una posible prórroga del programa, las entidades presididas por Gustavo Idígoras indicaron que “las operaciones de compra de soja se extenderán hasta la próxima semana y el gobierno tomará los recaudos correspondientes para finalizar el 30 de septiembre”.
Luego destacaron: “Reafirmamos que la cadena de soja está en condiciones de aumentar su producción y exportación si se alivia la pesada carga tributaria, que es la más alta de toda la economía nacional”, indicaron desde CIARA-CEC.
Al respecto, propiciaron “reglas transparentes y previsibles en materia de producción, comercialización, impuestos y tipo de cambio competitivo”, además de solicitaron al Banco Central que “revea las medidas restrictivas lo antes posible”.
Los 7.000 sojeros
El jueves pasado se desarrolló en Rosario el seminario ACSOJA 2022, un evento que está organizado por la cadena de la soja argentina. Allí estuvo el secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Juan José Bahillo, quien participó en la apertura en calidad de orador y celebró “la decisión del ministro Sergio Massa de implementar el Programa”, además agradeció “el esfuerzo y compromiso de las y los productores” para superar la meta de los US$ 5.000 millones.
Con respecto a los 7.000 productores tenedores de soja que adhirieron a la medida, Bahillo destacó que “cerca de 4.000 liquidaron menos de 100 toneladas, lo que da cuenta de que el pequeño y mediano productor se vio particularmente beneficiado”.
Este dato es interesante, porque demuestra que el porcentaje mayor de los que vendieron su soja fueron pequeños y medianos productores, pues por lo que ahora se conoce un 57% del total ha vendido un promedio de solo 3 camiones de soja (90 toneladas).
Otro tema que tocó el encargado de la cuestión agropecuaria en la cartera de Sergio Massa es la importancia del sector sojero en la economía. En este sentido, el Secretario Bahillo destacó que la cadena de la soja en su conjunto es “clave para la economía nacional”, a la vez que rechazó “la falsa idea de que el sector agropecuario está primarizado”. «Desde inversión en genética hasta las agtech, el sector genera avances científicos y agregado de valor a la producción del país”, destacó Bahillo.
Incluso fue un poco más allá, cuando dijo que “El 92% de lo que exporta la cadena de la soja es producción con valor agregado e innovación científica nacional”, y agregó que “los productores están altamente tecnificados en aras de producir más e impactar menos”.
A modo de conclusión se puede decir que está claro que el resultado de la medida de Massa se va a notar en las cuentas fiscales de este año. Pero al margen de esto, hay dos ejes centrales que son necesario resolver desde los gobiernos para que la cadena de la soja comience a expresar toda su fortaleza y contribuya al progreso. En primer lugar, la necesidad de reglas claras y luego la previsibilidad desde el punto de vista financiero.