Los tamberos de Santa Fe, junto a otras entidades que representan a sectores como porcinos, avicultores y feedlots, buscan generar un denominado “frente común” para exigir al Ministerio de Economía que les “defina un resarcimiento” por los perjuicios que les ocasionó la implementación de “dólar soja” para los reintegros de exportaciones.
Para los tamberos, el tipo de cambio especial para la soja pega fuerte en el costo de los insumos del sector, a tal punto que estiman que deberían incrementar en un 20% su producción enfrentar el incremento del alimento balanceado.
Los productores se quejan del impacto que causó el salto de $20.000 por tonelada en el precio de la soja como consecuencia del dólar diferenciado.
“Estamos generando un frente común de entidades que representan a aquellos sectores que fueron perjudicados con el dólar soja. Por eso, hemos solicitado una reunión urgente” con las autoridades del Ministerio de Economía que encabeza Sergio Massa. Queremos que nos expliquen qué medidas seguirán a la que adoptaron con la soja. Acá estamos representados todos los sectores que hemos sido perjudicados con aquella decisión”, explicó el secretario de la Mesa Provincial de Lechería de Santa Fe (Meprolsafe), Fernando Córdoba.
El mismo dirigente, explicó que “la gestión de una nueva reunión entre el gobierno nacional, los tamberos, los productores avícolas y otros, debe provocar en el gobierno nacional la sensación de la unidad de los reclamos”, señalaron los voceros del grupo.
Desde el sector tambero, la respuesta no se hizo esperar. Y el dirigente santafecino aprovechó la circunstancia para señalar lo que Santa Fe debería recibir. “Por retenciones, lo que el Estado recauda, son aproximadamente unos 240 millones de dólares. Si eso se trasladara al productor, significaría un aumento de $2,50/3,00 por litro de leche”, argumentó.
Durante el encuentro, realizado en un hotel del microcentro de Rosario, al sur de esta provincia, los dirigentes efectuaron una rápida compilación de los hechos que provocaron la reunión. Pero además, expusieron sus puntos de vistas sobre diferentes rubros que siguen impactando.
“En el caso del alimento balanceado, la incidencia es de un 10%. En los alquileres de los campos, un poco más porque en muchas zonas se pacta en quintales de soja. Eso, aunque tenga vigencia solo en septiembre, tendrá un fuerte impacto”, señaló Córdoba.
El productor expresó su desconfianza sobre la resolución aclaratoria que publicó el Gobierno que dispone que el “dólar soja” no regiría para balanceados, expeller y alquileres, ya que los valores fueron actualizados. “No sabemos cómo se va a implementar, el productor que vende soja ¿cómo sabe si va a exportación o mercado interno?; está todo muy manoseado, poco claro”, se quejó.
Sin protestas
Finalmente, Córdoba aclaró que no está previsto que se adopte ninguna medida de protesta ni de reclamo. “Queremos que nos escuchen desde el Gobierno y que podamos reunirnos para evaluar este tema”, dijo. Sin embargo, si la presión sigue, no habría que descartar un nueva medida de protesta, como seguramente lo exigen la bases en las última semanas”, dijo otro miembro activo de la Mesa Provincial de Lechería.
Para que no quedaran dudas del reclamo, se explicó que el impacto que causó en la lechería el salto de $20.000/t en el precio de la soja, a partir de la puesta en vigencia del llamado dólar soja. “En un tambo mediano de 150 vacas, que utiliza expeller de soja, se consumen 25 a 30 toneladas por mes; y el incremento del grano representa un gasto adicional de 600.000 pesos mensuales”.
El dirigente sostuvo que “el lunes, después del anuncio del dólar soja, el precio del expeller era de 75.000 pesos, 25.000 pesos más que la semana anterior, eso tiene una gran incidencia en los costos y en los números de cualquier empresa”, se quejó.
Córdoba recordó que, en un tambo mediano, que produce 3000 litros de leche, se requieren 15.000 kg de expeller mensuales para las vacas de recría. “Eso, para el sector lácteo es un golpe muy grande”, recalcó.