Historia de CASE IH Capítulo 2

CAPÍTULO 2

La historia de Case y Dingee

Todas las historias de las empresas, ya sean grandes o chicas, tienen a personas como principales protagonistas. Esas personan son aquellas que crean esas empresas a partir de detectar una necesidad y ofrecer una respuesta. Pero lo cierto es que esas personas no suelen hacer solos esas tareas, las realizan con otras que le colaboran.

Ahora vas a leer una de las historias más desconocidas de la empresa CASE IH. Se trata de la relación entre el fundador de la compañía Jerome Increase Case y William W. Dingee, el hombre que creó y desarrolló el primer agitador/separador, es decir la primera trilladora industrial de la empresa CASE.

W. W. Dingee

William Dingee (1831-1919), nació en Filadelfia (EE. UU) y comenzó su carrera como ingeniero mecánico en el año 1852 cuando fundó su propia empresa en la ciudad de York, en el centro sur de Pensilvania. Esta empresa se llamó WW Dingee and Company, y en esta fabricó maquinaria agrícola y maquinaria pesada.

Uno de los empleados de William Dingee, que solo tenía una antigüedad de 18 meses, recibió de su padre una herencia y utilizó ese dinero para comprarle una parte de la empresa. Este hombre era Arthur Briggs Farquhar, por lo que la nueva compañía pasa a denominarse Pennsylvania Agricultural Works.

Con la Guerra civil americana acercándose, el negocio de la fabricación y venta de maquinaria no era lo que se esperaba. Sumado a esto, la nueva fábrica de Dingee y Farquhar sufre una destrucción total por culpa de un incendio. La compañía no tenía asegurado su capital de trabajo por lo que entró en quiebra y se disolvió la sociedad.

Como curiosidad se puede decir que Arthur Briggs Farquhar continuó en la fabricación de maquinaria. Dicen algunos historiadores que el primer pedido de exportación fue un envío de arados a Paraguay en 1870, momento en el que Farquhar afirmó que su compañía fue el primer fabricante estadounidense en exportar implementos agrícolas a América del Sur.

Pero sigamos. Aproximadamente en 1863, William Dingee comenzó a trabajar a la empresa Geiser Threshing Machine Company por lo que se muda de Pensilvania a la ciudad de Racine, para establecer una subsidiaria de la Geiser. Fue allí donde se conocieron con Jerome Case.

Poco tiempo después Dingee se muda a Oshkosh a trabajar con Philetis Sawyer propietario de la Sawyer Manufacturing Co., donde construyó, entre otras herramientas, un agitador o trilladora bajo el nombre de Sawyer.

Jerome Case, que ya lo conocía, quedó tan impresionado con las capacidades técnicas de Dingee que él en persona, en 1878, fue a Oshkosh para convencer a William Dingee de que trabajara para la CASE; cosa que consiguió.

Cabe destacar que, cuando Dingee ingresó a la J.I. Case trajo consigo todas las patentes que este había realizado, por lo que el primer desarrollo que empezó a fabricar la Case de este excepcional inventor fue la famosa unidad de potencia de caballos denominada Dingee-Woodbury, que había desarrollado el primero y que se utilizaba para generar movimiento a las primeras trilladoras estáticas que fabricó Case.

Este excepcional invento, patentado en 1876 y llamado Horse Power, era nada más ni nada menos que una máquina de hierro compuesta por engranajes reductores que utilizaba caballos, los cuales al girar en redondo alrededor de la máquina, provocaban movimientos que luego mediante un eje y una cinta larga hacían funcionar una trilladora estática. Los caballos eran conducidos por un hombre que se paraba en una plataforma de madera en el centro y arriba de la máquina.

Hasta la aparición de este equipo los movimientos de una trilladora se generaban mediante el uso de caballos, pero sobre especies de carros con barandas, en los cuales los animales caminaban sobre cintas. Lo cual era muy dificultoso establecer movimientos constantes y uniforme. El Horse Power de Dingee era más preciso y fue reemplazada cuando aparecieron los motores a vapor.

Volviendo a William Dingee, hay otro dato curioso, pues se le atribuye haber creado aproximadamente unas cien patentes relacionadas con mejoras en la mecanización agrícola. En 1886 se unió a la Sociedad Americana de Ingenieros Mecánicos y por su naturaleza genial y amable fue considerado como un ciudadano destacado para la comunidad.

En 1904 Dingee y Wallace MacGregor escriben un libro al que titularon “Ciencia de la Trilla Exitosa”, en el cual detallan con precisión los distintos desarrollos de estas máquinas y sus recomendaciones para el mantenimiento de las trilladoras y de los motores a vapor que había fabricado hasta ese momento la J.I. Case. El libro, de 215 páginas con detalles y fotos de maquinaria, tuvo 4 ediciones. Link al libro original en su primera edición: https://archive.org/stream/scienceofsuccess01macg/scienceofsuccess01macg#mode/1up

William Dingee, fue tan importante para la empresa CASE que siguió siendo empleado y hombre de consulta de la compañía hasta 1906, cuando ya tenía 75 años. El protagonista de esta historia falleció el 28 de mayo de 1919 a la edad de 88 años. Fue sepultado en el cementerio de Mound, Racine, Wisconsin. Muchos de los funcionarios de la compañía CASE, viejos amigos y gran cantidad de trilladores asistieron a su funeral.

Una carta al trillador

En 1911, solo 8 años antes de su fallecimiento, William Dingee escribió una carta al editor de la revista American Thresherman (Trilladores Americanos), la cual fue publicada en una de estas ediciones. En esta, el famoso ingeniero explica con detalles su vida y sus logros junto Jerome Case. Textual dijo: “Desde 1852 hasta 1863 estuve en el negocio de las trilladoras en York, Pennsylvania. El 8 de febrero de 1863 llegué a Racine, Wisconsin, con las piezas fundidas de algunas de las máquinas Geiser que se erigieron en las tiendas de J.I. Case, que hasta esa fecha había manejado su negocio solo. Este fue el comienzo de una amistad que terminó solo con su muerte en 1891 (se refiere a la muerte de Jerome I. Case). Ambos estábamos enamorados del negocio de las trilladoras y trabajamos juntos para su mejoramiento, compartiendo alojamiento y comida en muchos asentamientos fronterizos, donde había condiciones inusuales. Él, de larga experiencia, era el mejor operador y yo el mejor mecánico. Esos eran los días en que nos trasladábamos a caballo, él era un buen jinete, mientras que yo apenas podía distinguir a un caballo de un buey.
A mis muchos compañeros de trabajo en esta gran industria, incluidos los usuarios de maquinaria de trilla, les digo que no los he olvidado. Que en mis setenta y cinco años me retiré del trabajo y desde entonces he estado viviendo a la sombra de la gran Universidad de Chicago, asistiendo a las conferencias que me interesan y descansando de mis labores”. Firmado: WW Dingee, Chicago, Illinois.

Te puede interesar:

Menú