Nacira INTA supera con creces a sus predecesoras Alicia INTA, Huilen INTA y Rayén INTA. “Genera casi 8.000 kilos de materia seca por hectárea y es resistente al pulgón verde de los cereales evitando el uso de insecticidas”, afirman los obtentores.
Nacira INTA es una nueva variedad de cebada forrajera diseñada para pastoreo directo, confección de silajes o doble propósitos. Su rendimiento, cercano a los 8.000 kg de MS/ha, es 45 % mayor que las predecesoras Alicia INTA y Huilen INTA y 25 % superior que Rayén INTA.
El diferencial esta dado por su gran producción de forraje verde, gracias a la combinación de una alta tasa de crecimiento y un excelente rebrote que le permiten producir a lo largo de todo el ciclo, incluso en pleno invierno.
“Nacira INTA se caracteriza por su alta precocidad, incluso en siembras más tardías que las recomendadas, lo que genera rápidamente un primer pastoreo, aunque la época optima en la región pampeana es la primera quincena de marzo”, indicó Agustín González, investigador del INTA Bordenave y uno de los obtentores de la variedad.
“Es ideal para complementar otros verdeos como avenas y raigrases, siempre sembradas en distintos lotes, ya que cubre los baches forrajeros al inicio del otoño y en el invierno”, recomendó, detallando que tiene una excelente respuesta a manejos intensivos.
Además, destaca por su comportamiento sanitario que permite bajar los costos de las raciones producidas. “Lo saliente es su resistencia a la principal plaga de los verdeos de invierno, el pulgón verde de los cereales, que evita aplicaciones de insecticidas; y la tolerancia a mancha en red, escaldadura y mancha marrón, las enfermedades más importantes que afectan a las cebadas”, agregó.
Nacira INTA se comercializa mediante un convenio de vinculación tecnológica con el semillero SeedEx de Tres Arroyos, Buenos Aires.