El retrofitting es el proceso de actualizar sistemas o equipos antiguos con tecnologías modernas sin cambiar completamente el sistema del equipo original.
La palabra “retrofitting”, hace referencia a la remodernización de una determinada máquina, y en este sentido hay que decir que ya hay grandes marcas mundiales que están ofreciendo equipamiento a tal fin.
El retrofitting de una maquinaria agrícola puede involucrar la actualización de tractores, cosechadoras, pulverizadoras, sembradoras y otras máquinas, con la incorporación de tecnologías más modernas para mejorar su eficiencia, productividad y sostenibilidad.
Esto puede incluir desde la instalación de sistemas de navegación por GPS, pilotos automáticos, controles automáticos para una agricultura de precisión y hasta la actualización de motores para reducir el consumo de combustible.
El retrofitting en maquinaria agrícola permite a los agricultores aprovechar los avances tecnológicos sin la necesidad de invertir en equipos completamente nuevos, lo que puede ser una opción económica para mejorar la eficiencia y la productividad de sus operaciones agrícolas.
En sembradoras
“Se puede conseguir una sembradora usada bastante barata; sólo hay que encontrar una que tenga una buena barra de herramientas”, comentó un productor que buscó una exprofeso para hacerle un retrofitting.
Es que la mayoría de los agricultores consideran la compra de una sembradora nueva como una inversión a largo plazo. Teniendo esto en cuenta, ya hay varias empresas en Argentina que fabrican productos para actualizar con altísima tecnología una máquina aunque tenga sus buenas campañas encima.
De esa forma, con una menor inversión se logra que las sembradoras escalen a mayores niveles de precisión y eficiencia.
Esto se realiza mediante la actualización de la forma en que una máquina sembradora de hace algunos años pueda sembrar con toda la tecnología disponible hoy día.
Por caso, una máquina antigua podría evitar la superposición de semillas en las cabeceras de un lote y en cruces de surcos, con lo cual se mejora notablemente la siembra.
Esto se lograría con la incorporación de sensores que detectan la aplicación y realizan un corte automático e individual de cada línea de siembra.
También se le puede adicionar dispositivos que le permita realizar dosis variable que controlen la siembra y la fertilización de forma exacta gracias a sensores inteligentes instalados en cada bajada de semillas. Además, se podría medir cada aplicación, detectar distintas fallas y corregir desvíos para potenciar los resultados.
Desde ya que todo esto se podría ver a través de un monitor que controle las funciones de siembra, los sensores y la totalidad del sistema para gestionar la información y observar el desempeño de la sembradora de manera remota. Incluso colocarle a una máquina usada un dosificador electroneumático de semillas que permite duplicar la velocidad de siembra, llegando hasta los 14 km/h.
De todas formas, existen hoy dos situaciones en las que la modernización es una opción adecuada. En primer lugar, si el productor tiene una sembradora con una barra porta herramientas adecuada y una cantidad importante de líneas de siembra, aquí el retrofitting sería muy adecuado y la otra es cuando el productor necesita de una sembradora hecha exclusivamente a su medida.