El informe de GEA señaló que marzo «rompió el patrón seco». En Santa Fe el 80% del territorio está con condiciones óptimas. Los precios alientan la siembra.
Soplan buenos vientos para el cultivo de trigo. A poco de comenzar la campaña fina 2021/22, el cambio en las condiciones de humedad traza un panorama muy alentador para el cereal fino, que podría convertirse en el aliado más redituable de la soja en términos económicos.
«Si hubiese que sembrar mañana trigo, en Santa Fe el 80% del territorio tiene condiciones óptimas y en Córdoba, el 70%», indicó el último reporte de la Guía Estratégica para el Agro (GEA), el cual coincide con los pronósticos oficiales del Ministerio de Agricultura de la Nación, que prevén una campaña triguera «muy buena» con una superficie de 7 millones de hectáreas.
El doctor en Ciencias Atmosféricas José Luis Aiello indicó que «según las proyecciones, comienza a haber una tendencia hacia la normalización» y marzo recompone el patrón pluvial. «Las lluvias llegaron a las regiones de la franja este y las reservas hídricas pueden recomponerse razonablemente hasta el inicio de siembra fina», comentó el especialista.
De ese modo, en el tercer mes del año «se rompió el patrón seco del verano» y «puede ser bisagra para lo que sigue en otoño», agregó Aiello. Con las lluvias de la última semana, el mes terminó dejando al 75% de la región núcleo con lluvias por encima de las estadísticas. En marzo suele llover entre 100 y 125 milímetros (mm) y marzo del 2021 promedió en la región 110 mm. «La franja este -dónde más se encarnizó la falta de agua del semestre cálido- superó los 125 mm. Desde que arrancó la campaña gruesa las lluvias estuvieron muy lejos de las estadísticas y por eso marzo es una bisagra entre un verano extremadamente seco y la posibilidad de un otoño con lluvias normales», indicó GEA.
El subsecretario de Mercados Agropecuarios, Javier Preciado Patiño, afirmó que existen «fuertes probabilidades» de que la campaña de trigo 2021/22 sea «muy buena», con la posibilidad de alcanzar una superficie sembrada de 7 millones de hectáreas y una producción «factible» superior a 20 millones de toneladas.
«Tenemos un piso similar al de la campaña pasada y una meta de 7 millones de hectáreas. Entendemos que con buenos precios, lo cual estimula al productor a invertir en nutrición, cuidado del cultivo, buenas semillas, alcanzar las 21 o 22 millones de toneladas es factible», indicó.
Para el funcionario nacional existen «muy fuertes probabilidades de estar frente a una campaña de trigo y cebada muy buena», aunque, obviamente, estas proyecciones están atadas al comportamiento del clima. «Lo primero que necesitamos es que al momento que el productor vaya a sembrar se encuentre con humedad en el suelo. Si vemos los pronósticos, dicen que es bastante probable que lo logremos», consideró.
Como primera condición para prever una campaña de trigo superior a la anterior, cuando se sembraron 6,7 millones de hectáreas y se produjeron 16,9 millones de toneladas, son los buenos precios internacionales y una demanda creciente de los países importadores.
Euforia
«Con una cotización para el futuro mayo que hoy está en u$s 200 la ganas de sembrar trigo son terribles y todos están preparando las sembradoras», dijo el analista Dante Romano docente de Universidad Austral y analista de mercados. En el marco de un webinar organizado por InteliAgro, el especialista comentó que está muy dinámico el mercado de fertilizantes, con ventas y precios en alza.
También Alejandro Salomón, de Banco Patagonia, explicó que prevén que 2021 será «un año con mucha demanda de crédito por parte del productor, sobre todo incentivado por el nivel de tasas».
Aunque, el ejecutivo de la entidad señaló que se prevé que el Banco Central (BCRA) será más estricto en los requisitos para acceder a créditos a tasas subsidiadas a aquellos productores que retengan su grano, especialmente soja y trigo. «Es probable que no se tolere ningún porcentaje de retención», adelantó.