Este año se cosecharon 75 millones de kilos de uvas menos que en 2022. Es la cosecha mas baja desde 1954. Los factores climáticos que incidieron.
La sequía, olas de calor reiteradas y las heladas tardías impactaron de la peor manera en los viñedos este año: En San Juan ya casi no queda uva por cosechar y cierra la vendimia con 395 millones de kilos recolectados, el peor registro desde 1954.
El Instituto Nacional de Vitivinicultura va a dar a conocer mañana los partes de cosecha y aunque puede haber alguna leve diferencia en kilos, el dato es irreversible y la provincia cierra la peor cosecha de uvas en 69 años, confirmaron fuentes calificadas.
La cifra de 395 millones de kilos queda muy lejos de los 470 millones de kilos del 2022, y está un 2,5% por debajo de las estimaciones que había hecho el Instituto, que pronosticó para esta provincia que se iban a levantar 404,5 millones de kilos.
Hay que recordar que hasta ahora la mejor cosecha se había dado en el 2013 cuando se levantaron 720 millones de kilos de uvas en San Juan, con lo cual, se han perdido 325 millones de kilos este año.
A nivel nacional los números también reflejan una merma interesante, aunque aún pueden variar las cifras porque en Mendoza algunas zonas todavía están cosechando. Para esa provincia se pronosticó una cosecha de 1.013 millones de kilos, un 23% menos que el año pasado, pero se estima que en la realidad será hasta un 27% más baja.
La preocupación de los productores ahora gira en torno de los precios que recibirán por la uva que entregaron a las bodegas y lo que perderán ante la inflación. En la Mesa Vitícola, entidad que reúne a una buena parte de viñateros sanjuaninos, señalaron que el kilo de uva cereza ronda los $100 cuando ellos pretendían recibir entre $110 y $115; un kilo de uva blancas comunes tiene un precio de $120 cuando aspiraban a $130 o $140. Y un kilo de tintas comunes oscila entre $140 y $150 cuando el viñetero aspiraba a recibir $160 o $170. En todos los casos esos valores las bodegas compradoras los pagan en 4 a 6 cuotas fijas, a contar desde el mes d mayo o junio, con lo cual el productor terminará perdiendo frente a la inflación. “Con una inflación mensual de 6 o 7 % el perjuicio va a ser muy grande, nos tiene muy preocupados”, dijo su titular, Pablo Martín.
Por su parte, Juan José Ramos, desde la Asociación de Viñateros Independientes de San Juan, calculó que en todo el país se van a elaborar no más de 800 millones de litros de vino, para una demanda del mercado interno y externo de entre 1.000 a 1.100 millones de litros de vino. ” Eso significa que, al 1 de junio del año próximo, que es la fecha de liberación del vino nuevo que se está elaborando, quedarán 300 millones de litros, que es el stock técnico justo”, dijo Ramos, quien confía en que el precio del vino de traslado que se le paga al productor que elabora a maquila irá aumentando por encima de la inflación a medida que pasen los meses. Con respecto al productor que vendió la uva y no hizo vino, el empresario aseguró que su entidad va a insistir que el precio final a liquidar por la uva sea “lo que acordamos en el INTA Junín”, aludiendo a un encuentro inédito de entidades viñateras que se dio este año, donde los productores acordaron los precios mencionados anteriormente.
Justamente un tema que mantiene expectantes a los viñateros es cómo se instrumentará el “dólar agro”, y cómo puede beneficiar al sector primario. Es que uno de los condicionantes para las bodegas que quieran gozar con el beneficio de exportar con un dólar a $300 (frente al dólar oficial que está a $219) es que haya “un derrame” al productor, por lo que esperan que la industria tonifique los precios que pagará al productor que le entregó la uva.
Uvas a Mendoza
Los productores destacaron además que dentro de los números de cosecha también se debe contabilizar que, a diferencia de otros años, en el 2023 hay muchos kilos de uvas que se enviaron a elaboración a Mendoza, pero que fueron cosechados en San Juan.
Se trata de unos 20 millones de kilos que salieron desde aquí para ser elaborados en la vecina provincia, frente a 3 o 4 millones de años anteriores. Explicaron que incidió en este aumento la presencia de un jugador mendocino –bodega Los Haroldos- que alquiló este año una bodega en Caucete, y si bien recibió y molió allí la uva, la envió para elaborar a Mendoza. Lo directivos de esa bodega le prometieron al ministro de Producción local, Ariel Lucero, que van a elaborar y fraccionar vino en San Juan para la próxima temporada.
