Por estas horas se acaba de conocer que el exgerente de Molinos Tassara y actual tesorero del Club Sarmiento, Diego Cifarelli presentó su renuncia a la presidencia de la Federación de la Industria Molinera Argentina (FAIM).
En principio se presume que la razón de su alejamiento de la FAIM se debió a desavenencias respecto a cómo se está implementando el Fondo Estabilizador del Trigo (FETA).
Cabe destacar que el FETA fue creado por el Gobierno en marzo de 2022 a los fines de compensar el valor de la bolsa de harina que la industria molinera entrega a las panaderías.
Este mecanismo compensatorio, desde sus inicios y hasta el día de hoy, ha traído una serie de cuestionamientos del cual hasta el propio Cifarelli en varias notas periodísticas venía advirtiendo.
Hay que tener en cuenta que el FETA se constituye con fondos provenientes de los derechos de exportaciones al aceite y a la harina de soja que se venden al exterior.
Lo cierto es que se cobran cifras millonarias de dineros que luego son distribuido únicamente a los molinos que adhirieron al mecanismo compensatorio.
Es evidente que esta particularidad, en donde pocos molinos cobran mucho y muchos molinos cobran nada, fue degastando la exitosa gestión de Diego Cifarelli en la FAIM y por ello el dirigente juninense ha preferido dar un paso al costado. Dejando así una tarea que ya lleva 11 años de antigüedad.
Falta saber si también abandonará sus compromisos en la tesorería del Consejo Agroindustrial Argentino (CAA), la protesorería en la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (COPAL), la consejería en la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, sus tareas en la Junta Directiva de la Unión Industrial Argentina (UIA) y la Cámara Arbitral de Cereales.
