Así lo determinó un informe universitario basado sobre una encuesta realizada a agricultores. El informe destaca que la razón es la necesidad de cubrir deudas.
POR JOSÉ LUIS AMADO -PERIODISTA AGROPECUARIO- EXCLUSIVO PARA GRUPO LA VERDAD
Se acaba de conocer un informe proveniente de un relevamiento realizado por el Centro de Agronegocios y Alimentos (Ag Barometer) de la Universidad Austral. El reporte, que consta de 35 páginas, destaca que el sector productivo tomará esta decisión a los fines de cubrir distintos compromisos financieros.
En este marco, la decisión de los empresarios agrícolas representa una buena noticia para el Gobierno de Javier Milei, dado que este necesita con urgencia del ingreso de dólares ya que por distintas razones se ha venido retrasado la liquidación de granos.
“Estos datos resultan importantes, tanto para la industria procesadora como para el gobierno en términos de ingresos de divisas, ya que estas resultan claves para el programa financiero del Gobierno, cuyo objetivo central es la unificación cambiaria y el levantamiento del cepo”, destacó el informe.
A pesar de este escenario, las ventas todavía son bajas. Esto se explica debido a la expectativa que tiene el productor de ver una mejora en los precios internacionales de los granos. “Sin duda, los compromisos financieros pueden acelerar el ritmo de ventas de los productores”, remarcó la encuesta.
De todas formas, el Gobierno de Milei aclara constantemente que no habrá devaluación o levantamiento del cepo. Es que la posibilidad de alguna de estas decisiones en el corto plazo otorgaría una mejora en los precios, lo que haría que el productor retrase las ventas.
En concreto, el relevamiento arrojó que, durante marzo y abril el 30 % de los productores consultados manifestó que tendrá que vender hasta el 75 % de su producción de soja y maíz para cubrir todas las obligaciones financieras de la campaña. A este porcentaje se suma un 39 % adicional que piensa que necesitarán vender un 50% de su producción. En síntesis, sería casi un 70% de productores que deberán vender más de la mitad de sus granos.
Escenario productivo
Más allá de la decisión de vender o no, el relevamiento de la Universidad Austral reflejó que hay expectativas positivas para los próximos 12 meses. La medición mostró que se mantiene el optimismo de los productores.
Por otra parte, el índice de Condiciones Presentes mejoró con relación al año anterior (110 vs 22). Se debe a los buenos rendimientos que se obtienen en la campaña 2023/24.
“A los productores agropecuarios, de alguna manera, le resultan positivos los principios generales de la Ley Bases, al igual que el grueso de la población que piensa que el gobierno está en el sendero correcto. La búsqueda prioritaria por bajar la inflación, que se va a traducir en bajas en las tasas de interés, puede constituir un aliciente para la realización de inversiones”, explicó Carlos Steiger, director de la encuesta.
El informe destaca que: “Podemos decir que, con relación al futuro los productores agropecuarios, se está produciendo un achicamiento de los márgenes tanto para la campaña 2023/24 como para la campaña 2025/25 producto de la relación insumo/producto, donde muchos insumos importados se compran a un dólar muy superior (incluye Impuesto País) que, al dólar exportador, reduciendo así la rentabilidad”, expresa textual.
Otro párrafo indica: “En el corto plazo resulta imposible pensar en la reducción de las retenciones. Como medida positiva, se han reducido derechos de importación a insumos claves para la siembra de trigo. A los productores agropecuarios, de alguna manera, le resultan positivas los principios generales de la Ley Bases, al igual que el grueso de la población, que piensa que el gobierno está en el sendero correcto. La búsqueda prioritaria por bajar la inflación, que se va a traducir en bajas en las tasas de interés, puede constituir un aliciente para la realización de inversiones. Es decir que el optimismo se basa más en la esperanza de un cambio estructural de la economía argentina que en los datos objetivos de rentabilidad, cuyos márgenes se están achicando”.
Producción de trigo
El informe, también reflejó que el financiamiento de la siembra de trigo 2024/25 se realiza en su mayoría con fondos propios de los productores, canje a cosecha y financiamiento de los proveedores de insumos. Del relevamiento se desprende que el 50 % de los productores financió la siembra de trigo con fondos propios, un 29 % con canje a cosecha y un 12 % se financió con proveedores de insumos.
“Prácticamente, no hay financiamiento bancario, aunque es de esperar que en el futuro cambie el comportamiento de los bancos comerciales con tasas de interés a la baja, dejando de financiar al Estado y cumpliendo su rol de otorgar créditos al sector privado: motor de la economía”, señalaron los especialistas de la Universidad Austral.
Finalmente, un dato adicional. Destaca la encuesta que “un 60% de los productores son optimistas en cuanto a la evolución de los precios de soja y maíz basados en los mercados externos. El optimismo de los productores de Argentina contrasta con el pesimismo de los productores de Estados Unidos, de todos modos y por distintas razones, ambos coinciden en que no es un buen momento para realizar inversiones en activos fijos”.
