CASE en Argentina
POR: José Luis Amado -Periodista Agropecuario e Investigador-
En 1880, la empresa de Jerome Case pasa a llamarse J.I. Case Threshing Machine Co., esta compañía diez años después, es decir en 1890, abre en Argentina la segunda oficina internacional después de la de Inglaterra, dando cuenta de la importancia mundial del sector agropecuario argentino.
Aquí vale una aclaración, CASE no fue la primera empresa extranjera fabricante de maquinaria agrícola en traer a la Argentina su maquinaria agrícola, dado que en 1883 había inaugurado una oficina comercial la empresa McCormick Harvesting Machine Company de Cyrus McCormick. En esos años la McCormick, entre otras herramientas, fabricaba segadoras y su representante oficial en nuestro país fue la empresa Agar Cross y Co., que estaba ubicada en Av. Paseo Colón y calle Venezuela de la ciudad de Buenos Aires.
Entrando en el terreno de las especulaciones, me permito inferir que la empresa CASE eligió este destino en función que 7 años antes se había instalado aquí su más importante competidor en la fabricación de trilladoras. Incluso se ubicó a solo cien metros del edificio de la Agar Cross.
Otro punto a tener en cuenta es que entre 1870 y 1890 la producción cerealera en Argentina, aunque incipientemente, ya había comenzado a exportar granos a los principales destinos del mundo. Este aumento en la producción conllevaba necesariamente a una mayor mecanización de la agricultura local y por lo tanto al abandono progresivo de labores manuales. Como dato curioso puedo indicar que según el economista Orlando Ferreres (en su libro: “Historia Argentina en Cifras” del año 2006), en el año 1890 se producían solo 1.000 toneladas de trigo, maíz y lino, pero 20 años después (1910) Argentina ya producía 10.000 toneladas de esos granos. Otro dato es que en 1899 se sembraban en todo el país 4.000 hectáreas de maíz, trigo y lino.
Otra referencia no menor es lo que aporta Damián Bill en su abstract “Mercado y fabricación de maquinaria e implementos agrícolas en la argentina (1870-1940)”. Bill explica que “Entre 1891 y 1895, ingresaron al país 2.581 trilladoras, de las cuales un 67% procedían de Inglaterra, 11,8% de los Estados Unidos y 4,22% de Bélgica”. Es decir que de los Estados Unidos entre 1891 y 1895 entraron al país 310 trilladoras. Por lo que es lógico pensar que una gran mayoría de ellas eran marcas CASE y McCormick.
Esta incorporación de maquinaria entre los productores locales estaba determinada por el exponencial aumento del área cultivable. Puntualmente, y para tener una dimensión del aumento en la producción agrícola, explica el historiador Damián Bill en su trabajo: “La industria argentina de maquinaria agrícola (1870-1975) evolución y problemas de su desarrollo” que la empresa Schneider de la localidad santafesina de Esperanza “en 1890 fabricó 2.500 arados de una reja, 200 de dos rejas, 400 rastras de hierro, 150 sembradoras y 150 ventiladores al año. Lo que había comenzado como una pequeña herrería de campaña, era el establecimiento de implementos rurales más importantes de la región. Para 1891 era la firma con más obreros de Esperanza”. También por aquellos años eran muy conocidas las herramientas de Juan Instilart ubicada en Tres Arroyos y las de Luis Tabernig en Esperanza, Santa Fe.
Los primeros domicilios de CASE en Argentina
Como conté más arriba, la J.I. Case Threshing Machine Co., desembarcó con su representación oficial en Argentina en 1890. Las oficinas de la administración principal estaban en ubicadas en la esquina de Av. Paseo Colón y Av. Belgrano, lugar donde hoy existe un estacionamiento de automóviles.
Esquina de Av. Belgrano y Paso Colón, de la ciudad de Buenos Aires.
El otro domicilio de la empresa, contemporáneo al de Av. Paseo Colón, seguramente lugar donde estaba el salón expositor donde se podía observar la maquinaria, estaba ubicado a solo unas cuadras, puntualmente en la esquina de calle Perú y Venezuela. Aunque también hay folletos que indican la calle Perú 447, entre calle Venezuela y Av. Belgrano, lugar donde curiosamente hoy también funciona un estacionamiento de vehículos. Lo más probable es que el concesionario haya ocupado esos cincuenta metros de la cuadra y a veces figuraba con el domicilio de la esquina y otras con el domicilio de calle Perú.
Edificio de calle Perú y Venezuela.
Calle Perú 447 en la actualidad. Como se ve aquí también hay un estacionamiento de vehículos.
Otro domicilio de la empresa, el cual aparece en algunos folletos de la década de 1930, fue el de Av. Ingeniero Huergo y Av. Juan de Garay, en el bajo porteño. Es curioso, porque en este domicilio no funcionaba la empresa CASE, sino que era el domicilio de la Compañía Argentina de Máquinas SA, la distribuidora de los productos metalúrgica Tandil y Rycsa, las empresas que fabricaron maquinaria y los primeros tractores CASE en Argentina.
Foto de un folleto de 1930 donde se indica el domicilio de Avenidas Ingeniero Huergo y Garay de la ciudad de Buenos Aires.
Otro dato interesante es que la J. I. Case, ya en 1919 había abierto una sucursal oficial en la ciudad bonaerense de Bahía Blanca. Las oficinas de la empresa estaban en calle Chiclana y 25 de Mayo, y el concesionario oficial en calle Brown esquina Fritz Roy de esa ciudad del sur bonaerense. Lo curioso es que en esa esquina funcionaba Agar Cross, por lo que se podría estimar que allí estaba la maquinaria y en el anterior domicilio las oficinas administrativas de Case.
Esquina de calles Brown y Fritz Roy en Bahía Blanca. Como se puede ver, fue un concesionario de Agar Cross.
La tercera sucursal oficial se inauguró poco después y la ciudad elegida fue Rosario (Santa Fe). Aquí también figura en dos domicilios distintos y, al igual que los anteriores seguramente uno es de las oficinas y administración y el otro el concesionario donde se encontraba la maquinaria. Uno de los lugares donde tuvo su domicilio la J.I. Case fue en la esquina de calle San Lorenzo y Entre Ríos (no se especifica el número, por lo tanto es probablemente que haya sido la esquina donde está hoy el Bar y Teatro La Sede), y el otro domicilio fue en calle Corrientes 732 (Pegado al antiguo edificio Bunge y Born Comercial).
Intersección de las calles San Lorenzo y Entre Ríos de la ciudad de Rosario, Santa Fe.
Cabe destacar que a principio del siglo pasado, y tal como se ve en los folletos oficiales, se promocionaban fuertemente los motores a vapor.
Esta foto es una rareza. El folleto oficial de Case indica que el motor a vapor es marca Águila.
La importación
Como dato adicional se puede indicar que la primera importación registrada de motores a vapor agrícolas fue en 1906. Lamentablemente es imposible saber acerca del volumen de motores a vapor importados, dado que estos se registraron en la Aduana Argentina bajo la denominación locomotoras. Incluso también se los registró como «motores», por lo tanto, no se puede saber con precisión la cantidad de equipos a vapor que se importaron en esos días. Aunque hay que explicitar que los registros son más específicos a partir de 1920.
Finalmente indicar que en 1891, es decir al año siguiente de la inauguración de la primera sucursal oficial de CASE en Argentina, el fundador de la compañía, don Jerome Case, fallecía a la edad de 72 años.
El márketing CASE de 1923
En el año 1923 la empresa JI Case Threshing Co, promocionaba que había llegado a la fabricación y la venta de 100.000 trilladoras. En función de este acontecimiento la empresa con asiento en Argentina realizó un folleto publicitario alusivo.
Folleto de la empresa Case del año 1923, en el cual se destaca el haber fabricado 100000 trilladoras.
En ese folleto se pueden apreciar un par de cosas interesantes. En primer lugar los distintos modelos que la empresa ofrecía hace 100 años atrás y luego el método de marketing que utilizaba para hacer conocer a futuros clientes esas maquinarias.
Los modelos que más promoción recibían eran las trilladoras CASE de acero, las cuales no tenían nombre específico solo se las reconocía por el tamaño del cilindro trillador. Por ejemplo la más pequeña era la “CASE 20×28 con cilindro de 9 barras y enbocador automático, emparvador a viento y elevador y embolsador”. Luego en orden de tamaño ascendente estaba la CASE 22×36 con cilindro de 12 barras, la CASE 36×58 con cilindro de 20 barras y la más grande era la 40×62.
A estos modelos se les podía incorporar accesorios para trillar alfalfa y trébol. En el caso de la alfalfa se le cambiaba el cóncavo y la zaranda y en el caso del trébol se le adosaba un relimpiador.
En cuanto a los tractores con motor a explosión, el modelo que se promocionaba era el CASE Crossmotor y dentro de estos tractores estaba el 10-18, el 15-27, y el 22-40 Hp.
El folleto publicitario destaca cada máquina y fundamentalmente hace mucho hincapié en la experiencia personal de distintos usuarios ubicados en diferentes zonas productivas de Argentina. Así se aprecia una cantidad de productores que les habían enviado cartas de agradecimiento a la empresa por las virtudes de la maquinaria.
Por ejemplo el Sr. Alfredo Bo de la ciudad de Suipacha el 7 de febrero de 1923 dijo “Tengo el agrado de manifestarles que he efectuado la trilla de lino en mi colonia “La Elba” Estación Almeyda con la maquina CASE 22×36 que les he comprado el año pasado. Estoy perfectamente satisfecho del resultado obtenido a pesar del mal año, es decir de escaso rinde y de mucha paja: la máquina trilla este cereal sin quebrarlo, sin pérdida por la cola y de una limpieza al extremo. He alcanzado a trillar algunos días hasta 190 bolsas de un promedio de 66 kilogramos cada una, con solo 5 hombres entre horquilleros y bolseros. Debo manifestarles también que estoy satisfecho por la sencillez de este equipo… creo que en un año normal podré trillar sin ningún esfuerzo 500 bolsas de lino”.
Escritos como el anterior se repiten en todo el folleto, lo cual es destacado en la pieza publicitaria como “Véase lo que dicen nuestros clientes”.
La alianza CASE/RYCSA
En la década de 1950, con la política de Industrialización por Sustitución de Importaciones (ISI), caracterizada por la protección del mercado interno y la promoción de las actividades industriales desde el Estado, se da un fuerte impulso a la industria local. Tal es así que con la sanción del Decreto Ley nº 15.385/57 ratificado por la Ley nº 14.467 se declaró a la industria del tractor de interés nacional. A partir de 1958 se instalan en la Argentina filiales de empresas alemanas de tractores como Fahr Argentina S. A. (Fahr), Deca, Industria y Compañía S.A. (Deutz) y Reinstahl Hanomag Cura S. A. (Hanomag). En 1959 se crea John Deere Argentina S. A. (John Deere) y en 1961 RYCSA S. A. (Case), ambas controladas por empresas multinacionales americanas con lo que se cubrían las necesidades del país. Durante esos años también fueron relevantes las políticas de fomento a la demanda, a través de créditos para la compra de maquinarias y distintos beneficios impositivos.
Folleto del Case 830 (RyCSA) de la Compañía Argentina de Maquinas SA ubicada en Av. Huergo y Garay que era el distribuidos exclusivo de Metalúrgica Tandil y Rycsa.
RYCSA es una sigla que se desprende de “Rosatti y Cristóforo Industrias Metalúrgicas S.A.”. Esta fue una empresa que se ubicaba en la ciudades bonaerenses de San Nicolás, Arrecifes, Riachuelo y la ciudad de Ciudadela. Esta empresa se dedicó a la fabricación de calderas, puentes grúas, vagones de tren, construcciones metálicas y hasta de automóviles y maquinaria agrícola como cosechadoras y tractores.
Los tractores
Lo primero que hay que indicar es que la empresa RYCSA produjo para el mercado argentino los tractores CASE 830. Lo hizo porque obtuvo la licencia de fabricación de la subsidiaria local de la empresa americana, aunque los tractores los terminaba armando otra empresa que se llamaba Metalúrgica Tandil que estaba ubicada en esa ciudad de la provincia de Buenos Aires.
Indican que estos tractores solo los fabricaron durante algunos pocos años a principio de la década del 60. Los colores eran el característico color crema en el capot y el color rojo en el motor, bastidor y ruedas. Los modelos eran todos con motor diésel y el modelo más conocido fue el 830 de 66 Hp.
La actualidad de CASE en Argentina
Por estos días CASE está cumpliendo 131 años de antigüedad en Argentina. La marca creció tanto en el país al punto que en el año 2013 inauguró su propia fábrica de maquinarias agrícolas, la cual está ubicada en la localidad cordobesa de Ferreyra. La idea es la de abastecer al mercado nacional e internacional.
Al momento de su inauguración la empresa informó inversiones por más de U$S 200 millones y la generación de 2100 empleos directos e indirectos.
En esta planta se produce las cosechadoras Axial-Flow Serie 130 y 230 constituyendo uno de los mayores hitos en la historia de la marca en Argentina. Este lanzamiento data del 2016 y en ese momento la compañía indicó que se invirtió cerca de 40 millones de dólares en el desarrollo del proyecto. El último lanzamiento nacional de la empresa fue en 2020 con los nuevos tractores Puma LWB en versiones que van de 197 a 234 CV.
Algunas otras fotos:
Foto del interior del Salón del Automóvil en Buenos Aires en el Pabellón de las Rosas de Palermo, del año 1918. Se puede ver que la empresa case estaba presentando uno de sus autos.
Portada de un catálogo de productos de la empresa, en este caso es del año 1911/1912.
La empresa, con la compra de una maquinaria, entregaba esta libreta de anotaciones. La misma estaba forrada en cuero.
Tapa de un Folleto Case de 1923 en Argentina
A principio del Siglo pasado, la JI Case editaba una publicación con testimonios de clientes y usuarios de su maquinaria. En este caso se ve la foto de una portada, es del año 1922.
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